"Gran operación de limpieza étnica en Kosovo" (de los titulares de los periódicos del 29 de marzo de 1999). Y es cierto... solo que para que la certeza coincida con la realidad hay que denunciar que es la OTAN la que está organizando la limpieza étnica. Utiliza para ello masivamente misiles y bombas de toda clase contra la población serbia de Kosovo, habiendo previamente evacuado de los lugares bombardeados a la población de origen albanés en una operación coordinada entre la "guerrilla" y la OTAN y haciendo creer al mundo, a través de una gran manipulación informativa al estilo nazi, que la limpieza étnica es obra de los yugoslavos.

La OTAN, en la que está la aviación del ejército alemán (IV Reich), son buenos discípulos de Hitler, Goering, Goebels, Himmler... Ya es vieja la treta de los nazi-imperialistas. Hitler quemó el Parlamento alemán y culpó a los comunistas para iniciar su larga y macabra marcha hacia la guerra de exterminio de pueblos y naciones.

Hoy el imperialismo yanqui y sus socios, enfrentados con una grave crisis financiera producto de su sistema capitalista y comprobando la resistencia y las luchas populares en todo el mundo contra las medidas económicas y laborales antisociales y contra la plaga del paro, se han lanzado por el camino de la guerra de agresión para terrorizar al mundo y como medio de "regeneración" de su podrido y depredador sistema capitalista de dominio y explotación intensificados al máximo.

A nadie se le escapa que si el ejército yugoslavo estuviera llevando a cabo una matanza en Kosovo no ubiera dejado salir a la población albanesa masivamente organizada y encuadrada por elementos de la "guerrilla". La realidad es que nada más producirse el éxodo la OTAN ha empezado a bombardear masivamente Kosovo y en particular su capital Pristina arrasándola indiscriminadamente lanzando bombas y misiles contra los núcleos de la población. Esto es limpieza étnica masiva al estilo de Hitler, empleando las armas más destructivas para aniquilar la población serbia de Kosovo, mientras continúan los bombardeos sobre las ciudades y la capital de Yugoslavia masacrando a la población civil. Esta es una auténtica declaración de guerra de las potencias imperialistas, dirigidas por el imperio yanqui contra la humanidad y, en este sentido real, ES OTRA GRAN AGRESION Y OFENSIVA MILITAR DE LA III=AA GUERRA MUNDIAL QUE DESENCADENARON CON LA LLAMADA GUERRA DEL GOLFO. Para hacer frente a esta realidad es preciso llevar el análisis hasta las últimas consecuencias y no quedarse a medio camino. Estamos en plena escalada bélica del imperialismo contra el mundo no imperialista.

Es una guerra mundial por entregas y dividida en capítulos; es un auténtico genocidio televisado en directo a todo el mundo como el mayor espectáculo de la historia.

La estrategia imperialista consiste en aislar y "demonizar" al enemigo escogido y concentrar el máximo de fuerzas y medios tecnológicos de destrucción con un mínimo de riesgo para las vidas de los agresores (la lección de Viet Nam). Es una guerra que salta de un lugar a otro procurando que el incendio no se generalice. Se pueden anunciar ya los próximos campos de batalla: allí donde hay un problema grave para el imperialismo, una amenaza para su sistema de dominación mundial o un punto estratégico para su economía, o para su guerra, o para probar sus armas nuevas o azuzando los enfrentamientos entre pueblos o etnias para vender sus armas viejas etc...

El imperialismo yanqui y sus más fieles aliados tratan por todos los medios de que los arboles de sus guerras locales y localizadas no nos dejen ver el bosque de la estrategia mundial global y concreta de esta sucia guerra mundial, elaborada minuciosamente con arreglo a la situación actual internacional y teniendo en cuenta las experiencias anteriores de las dos guerras mundiales que desembocaron en el triunfo del socialismo en Rusia, en la primera y su implantación en numerosos países, en la segunda.

La actual guerra mundial es la que corresponde a la etapa final del capitalismo cuando el imperialismo, una vez que ha dominado el mundo y entra en crisis irresolubles, pretende perpetuarse por la vía de las agresiones militares escalonadas. Y su estrategia militar, que concuerda con la hegemonía del imperialismo yanqui en todo el mundo, combina la política del "tomahawk" con la política del dólar.

En relación con la situación en Kosovo resulta bien extraño que la "guerrilla" albanesa con tanto éxodo en los últimos días y con toda la tecnología y armamento que esta recibiendo masivamente no haya podido presentar al mundo ni una foto de los "pueblos enteros incendiados" que dice Solana, el portavoz del imperio yanqui. Sí hubo una foto truncada que dio la vuelta al mundo el 28 de marzo y esto lo confirman fotógrafos y periodistas desplegados en las fronteras de Kosovo. Ahora, después de los bombardeos masivos de la OTAN, les será más fácil atribuirles todo a los yugoslavos. A ningún serbio se le iba a ocurrir desalojar la población albanesa que era lo único que podía frenar en parte los ataques criminales de la OTAN.

El corresponsal de El País en Bruselas (W.O.), en su crónica del día 29 en la pag. 2 del periódico, escribe: "pese a los esfuerzos Atlánticos por desvincular la huida de los ataques occidentales, la OTAN corre por primera vez el riesgo de que toda la operación armada empiece a ser vista con desconfianza por los ciudadanos europeos y norteamericanos".

La realidad es que la salida masiva de los albaneses de Kosovo no ha sido la consecuencia del bombardeo de la OTAN sino la condición previa para intensificar indiscriminadamente esos bombardeos contra la población serbia y en conjunción con los asesinatos de la "guerrilla" albanesa contra el pueblo serbio. En relación con esta "guerrilla" tenemos que recalcar que todas las cosas pueden transformarse en su contrario en determinadas circunstancias: así la socialdemocracia se convirtió en socialimperialismo y no pocos partidos comunistas en socialdemcratas defensores del orden y del sistema burgués. La actual "guerrilla" de Kosovo nació ya transformada al ser hija de la mafia albanesa y de la política de agresión de los imperialistas en los Balkanes. No es más que un instrumento del imperialismo. Son los paramilitares de la OTAN.

La humanidad con todos sus valores positivos se encuentra ante una encrucijada histórica decisiva.

Es la hora de la unidad contra el imperialismo. Es la hora de la solidaridad inmediata y efectiva con los pueblos y naciones agredidos por el imperialismo. O la humanidad acaba poniendo fin a las guerras y al sistema que las engendra, o el imperialismo acabará destruyendo la humanidad.

Solidaridad con la República Federal de Yugoslavia!

Proletarios, pueblos y naciones oprimidas de todo el mundo, unámonos contra el imperialismo!
 

COMUNISTES de CATALUNYA